Londres.- Un estudio realizado en Inglaterra ha
demostrado que después de ingerir unos buenos tragos de bebidas alcohólicas, no
existen mujeres ni hombres feos.
Según investigadores de la Universidad Roehampton de Londres,
el alcohol afecta al área del cerebro responsable por percibir la simetría de
lo que se observa. Cuanta más alta es la concentración de alcohol en la sangre,
la capacidad de distinguir entre simétrico y asimétrico disminuye.
El estudio fue basado en la tesis de que las caras más
simétricas son las más atractivas. Para realizar el estudio los investigadores
se trasladaron a un bar local a donde encuestaron a voluntarios sobrios y
ebrios. Y de paso se tomaron unos traguitos.
Usando una prueba de alcoholemia, seleccionaron a 64
voluntarios y los separaron en dos grupos. Se les mostró 24 pares de rostros
—uno simétrico y otro asimétrico— para que escogieran las caras más atractivas
desde su punto de vista.
Posteriormente les mostraron un único rostro para que
definieran si era simétrico o asimétrico. Los resultados arrojaron que las
personas con alcohol en sangre resultaron tener mayores dificultades en elegir
por una de las dos caras, a diferencia de las personas sobrias.
Entre copa y copa los científicos lograron llegar a la
conclusión que las mujeres se ven más afectadas por este fenómeno.
Aparentemente debido a que el cerebro masculino tiene mayor predisposición a lo
visual.
No cabe duda que el dicho “estaba borracho/a…”Yo estuve con
vos anoche”?…”, ahora tiene sustento científico.