Evidenciado ha quedado. El informe preliminar presentado por
la Procuraduría General de la República, ante el apresamiento y sometimiento a
los presuntos implicados en el caso sobornos-Odebrecht, pone de relieve el tema
del patrimonio de entidades y personas, las falsedades en declaraciones de
bienes, ante la Dirección General de Impuestos Internos (DGII) y el lavado de
activos.
Pero si eso poco que estaba oculto, y ahora sale a relucir
mediante proceso investigativo de rigor que se hiciera, el misil nuclear que
explotaría con el destape del secreto bancario en nuestro país, sería para
llevarse a un 60% de la clase política, comercial, empresarial y de la
denominada sociedad civil de esta nación.
Son dominicanos, simplemente eso..
Que lance la primera piedra quien declara realmente su
patrimonio de forma correcta, registra todas sus operaciones ante la DGII y
paga los impuestos correspondientes sobre el global de las operaciones,
incluyendo la revisión del manejo de sus actividades bancarias, sus depósitos corrientes,
a plazos y préstamos.
Evasión hereditaria en patrimonio y declaración fiscal…
Presentan una declaración de patrimonio amañada, falsa,
ocultan bienes que no presentan, otros los colocan a nombre de terceros, de la
familia y amistades confabuladas.
Lo mismo sucede con las declaraciones juradas de sus
operaciones financieras ante la DGII. Evaden el ITBIS, el impuesto a las
ganancias, el impuesto a los activos y todo lo que se llama carga fiscal de
ley, dejando el Estado de recibir miles de millones de pesos anuales por esas
operaciones fraudulentas.
Pero peor es lo que se da a nivel bancario, en donde realizan
operaciones millonarias muchas veces no declaradas, ni en su patrimonio, ni en
la DGII, aprovechando el llamado secreto bancario.
Evasión, fraude, lavado de activos, hurto, sobornos…es el
común denominador de un entorno político, comercial, empresarial y de la
sociedad civil, del que muy pocos pueden lanzar la primera piedra, como pidió
el Maestro Jesús de Nazaret.