Adriana Peguero
Ayer el equipo de periodista del LISTÍN DIARIO recibió una llamada del Despacho para obtener direcciones y teléfono de la familia de la menor, con la finalidad de iniciar el proceso de apoyo que requiere por su estado, por ser un embarazo de sumo cuidado.
La menor embarazada habita en una humilde vivienda junto a sus padres, quienes informaron que nunca se imaginaron que las visitas que hacía frecuentemente el adolescente de 17 años de edad que la embarazó, era porque estaba enamorado de su niña.
Con un rostro de preocupación, la niña manifestó que los amoríos la llevaron a mudarse con el adolescente y que entonces hubo un proceso de justicia, por lo que regresó con sus padres, pero que luego volvió a mudarse con él y entonces salió embarazada.
Contó que luego que se dio cuenta de que llevaba un bebé en su vientre, se fue a vivir de nuevo con sus padres. Sin embargo su progenitor dijo que “esa gente lo que está haciendo es una burla con nosotros, porque dicen que no le van a dar ni un pañal, pero como somos pobres y no tenemos los recursos para hacerle fuerza, no nos queda de otra que asumir los gastos que conlleve su alumbramiento y la manutención de la criatura”.
“El desapareció desde que la embarazó. No ha sido responsable y no le ha comprado ni una cama a mi hija. Él se dejó de ella y no le compró un vestido, no le compró unos zapatos, no le compró una cama para que durmiera, no le compró de nada”, dijo el padre de la niña, quien vive en extrema pobreza junto a su esposa y la nena embarazada.
Según la versión de los padres de la niña, el joven se aprovechó de la ingenuidad de su nena, pues se presentaba a la casa como un amigo y luego del embarazo ha abandonado el lugar.
Los padres clamaron por ayuda para salir adelante con la criatura.