BARAHONA: Las filiales del Colegio de
Dominicano de Periodistas (CDP) y del Sindicato Nacional de Trabajadores de la
Prensa (SNTP), elevan su voz de protesta por la mala práctica asumida por la
División Sur de la Direccional Nacional de Control de Drogas (DNCD), en contra
de sus miembros impidiéndoles ejercer su labor de informar como establecen la
Constitución y las leyes.
Son constantes las denuncias de malos tratos y atropellos de
parte de los agentes de la DNCD, no solo de los profesionales del área de la
comunicación, sino, también, a otros importantes sectores de aquí, que han sido
vejados y violentados en sus derechos, unos de informar y otros en su prerrogativa
de libre tránsito.
“El caso más reciente fue el intento de impedirle al
periodista Solimar Betances, ejercer sus funciones, fue impedido de grabar una
acción en contra de una dama y un caballero que se trasladaban en un carro por
la vía publica y que estos (los de la DNCD), le detuvieron y procedieron a
revisar el vehículo y al notar la presencia de Betances, en tono agresivo le
conminaron a moverse del lugar y dejar de grabar la requisa, no obstante este
habérsele identificado como periodista”.
Con estas actuaciones, el organismo anti drogas en Barahona
violenta el Artículo 49 de la Carta Magna, en lo concerniente a Libertad de
expresión e información, cuando dice: “que toda persona tiene derecho a
expresar libremente sus pensamientos, ideas y opiniones, por cualquier medio,
sin que pueda establecerse censura previa, que toda persona tiene derecho a la
información. Además, que todos los
medios de información tienen libre acceso a las fuentes noticiosas oficiales y
privadas de interés público, de conformidad con la ley”.
En franco desafío y desconocimiento y de estos imperativos
mandatos de la Ley de leyes, los miembros de la DNCD en esta ciudad realizan
todo tipo de acción en contra de ciudadanos violentando sus derechos, toda vez
que no se hacen acompañar de un representante del Ministerio Publico, por lo
que llueven las denuncias de que estos agentes colocan drogas, atropellan,
maltratan física, verbal y sicológicamente a quienes ellos les da la gana sin
que medie una autoridad que ponga freno a tales prácticas, las que ponen en
entre dicho su verdadero rol de controlar el uso y venta de estupefacientes en
el país y de manera muy particular en esta ciudad de Barahona.
Ante estos atropellos cometidos por la DNCD en contra de la
ciudadanía, y muy particularmente en contra de la prensa barahonera, el CDP y
el SNTP, no pueden hacer mutis, por lo que demandan del General Virgilio
Pacheco Garavito, Director Regional Sur de la Policía Nacional, con asiento en
Barahona; del procurador General de la
Corte de Apelación del Distrito Judicial de Barahona, doctor Bolívar de Oleo
Montero; del procurador fiscal titular Yván Ariel Gómez Rubio y del coronel
Elvis Martínez González, encargado de la
DNCD, detener esas malas acciones, violatorias de la Constitución
Dominicana y las leyes, que afectan considerablemente el buen desenvolvimiento
de los periodistas y la ciudadanía en sentido general.
Los periodistas y comunicadores de Barahona y todo el país,
tienen el sagrado deber de informar oportunamente y de forma objetiva a la
ciudadanía, por lo que impedirle el acceso a cualquier fuente noticiosa pública
o privada, sería cercenar el espíritu del artículo 49 de la Constitución, que
no busca otra cosa que garantizar que las ciudadanas y ciudadanos dominicanos
ejerzan en libertad el grasado derecho de estar informados.
Indicaron que esta situación la pondrán en conocimiento de
los Comités ejecutivos nacionales del CDP, SNTP y de la Sociedad de Diarios de
la República Dominicana, con el objetivo de que puedan mediar ante los
constantes atropellos de que están siendo objeto los y las periodistas.