Dice esa situación es una evidencia del fracaso de una
política pública, que centrada en reprensión, lo que ha generado es mucha violencia y corrupción.
EN SANTO
DOMINGO: El director
de Casa Abierta, Radhamés de la Rosa, afirmó hoy que la proliferación de puntos
de drogas, y el hecho de que sean de conocimiento público, es evidente que se
debe a la disposición de las autoridades de permitirlo.
¨Muchas veces se ha denunciado que esos puntos de drogas
tienen realmente un acuerdo extralegal con autoridades corrompidas de la
Policía Nacional y la Dirección Nacional de Control de Drogas (DNCD)¨, expresó
de la Rosa.
Entrevistado hoy en el programa Toque Final con Julio
Martínez Pozo, que se transmite los domingos por Antena 7, manifestó que esa
situación es una evidencia del fracaso de una política pública, que centrada en
reprensión, lo que ha generado es mucha
violencia y corrupción.
Al preguntarle, qué políticas deben implementarse para que
jóvenes que nacen y se desarrollan en un ambiente barrial, con notoria
presencia de microtráfico de drogas, puedan mantenerse alejados del consumo y
resistan la tentación de vincularse al negocio, el presidente de Director de
Casa Abierta dijo que los consumos de sustancias no están vinculados
axiomáticamente a las comunidades marginales y barriales, sino en toda la
sociedad.
Aseguró que las políticas actuales solamente hacen esfuerzos
por detectar los consumos y los traficantes en zonas populares, y eso se
evidencia como si fuese solamente allí. ¨El consumo de drogas es un fenómeno
social amplio y complejo que está en toda la sociedad. En las comunidades más
empobrecidas es urgente que el Estado intervenga, pero no con policías
solamente para controlar la droga, sino con políticas dirigidas a los jóvenes,
que les permitan conseguir educación, empleo, salud, y una fórmula que integre
a la comunidad a buscar mejores estrategias para enfrentar los problemas de
ella misma.
En ese sentido, dijo que son los comunitarios los principales
guardianes de su espacio, y enfatizó, que se deben tener políticas donde esa
parte de la comunidad participe directamente en todo lo que tiene que ver con la seguridad de su
comunidad.
En tanto, sobre el rol que ha tenido la Dirección Central de
Antinarcóticos de la Policía Nacional (DICAN), que se creó como instrumento de
persecución al microtráfico bajo el criterio de que la DNCD trabaja los casos
mayores, consideró que ese es un tema en el que las autoridades debieron de
reflexionar hace mucho tiempo.
Recordó, que desde el 1988, cuando se creó la DNCD, hay una
ley que dice que la DNCD es la autoridad máxima en materia de tráfico de drogas
sin decir que sea micro o macro.
La creación del DICAN, reiteró, es violatoria de la Ley 5088,
y a su entender no tiene razón de existir en estos momentos. Explicó que la
DNCD tiene en su interior a la Policía, a las Fuerzas Armadas, a La Marina, a
la Fuerza Aérea… a todos los elementos de seguridad del Estado, por lo que
entiende, que no tiene sentido esa organización, que ha sido piedra de muchos
escándalos, porque son las personas que están más directamente vinculadas a las
comunidades, y son las que más fácilmente se corrompen por falta de una
adecuada supervisión de su accionar.
Nota recibida del Programa "Toque Final"