BARAHONA: El Río Birán languidece en su lecho, producto de la actividad
humana que afecta sus cuencas alta, media y baja, donde hay una continua
deforestación, construcción de viviendas y el depósito indiscriminado de
desperdicios sólidos y humanos en su cauce.
Esas y otras consideraciones fueron externadas por el
ingeniero agrónomo Rafael Matos Féliz, destacado ambientalista barahonero,
durante una conferencia virtual dictada este domingo, 30 agosto, organizada por
la Fundación Cultural Los Buenos Amigos, a través de Zoom, Facebook y YouTube.
El también catedrático universitario, hizo un recorrido por
la historia de dicha fuente de agua, destacando el aporte de la misma al
desarrollo cultural y económico de la ciudad de Barahona, desde el siglo XIX, hasta
finales del siglo pasado.
Recordó con nostalgia la gran cantidad de árboles que
enriquecían al Birán, y la cantidad de jóvenes que disfrutaron de sus
abundantes aguas limpias y sin contaminación. Entre los árboles recordó el
mango, la quenepa, anones, jobos y otros, que también eran disfrutados por los
bañistas y las amas de casa que acudían allí a lavar la ropa de la familia.
A través de diapositivas ilustrativas del Birán y su entorno,
el conferencista mostró la forma violenta en que se ha estado degradando el
caudal, resaltando como causas principales, la deforestación de la cuenca alta
y la construcción de decenas de viviendas en su entorno.
“Encima de la cabeza del río se ha deforestado para practicar
el conuquismo y a todo lo largo de su lecho viven decenas de familias que
tienen conectados los sanitarios de sus casas directamente al cauce y además
lanzan allí los desechos sólidos que producen”, apuntó Matos Féliz.
Aseguró que el río puede ser rescatado, pero para ello es
necesario que el Ayuntamiento, Medio Ambiente, Salud Pública, Obras Públicas,
las universidades y las organizaciones sociales, como la Sociedad Ecológica,
las juntas de vecinos, la Alianza Estratégica, la Fundación Los Buenos Amigos y
otras entidades de Barahona, se coordinen para elaborar un plan de acción que
lleve a cabo el necesario rescate del Birán.
Planteó que ese plan debe contar con el imprescindible apoyo
del Estado, ya que es necesaria una gran inversión del gobierno, para desalojar
las viviendas que están más próximas al río, construirles uno o varios
complejos habitacionales lejos del área, para sanear el río y construir un
Parque Fluvial, desde la cabeza hasta su desembocadura.
Concluyó indicando que lo primero que debe hacer el Estado, a
través del Ministerio de Medio Ambiente, es prohibir toda actividad humana en
la cuenca alta del río.