Por: Elsa Bello
Barahona, R.D.- La denuncia fue hecha por la señora Marcia Suárez, quien narró la odisea a la que fueron sometidas seis vacas, propiedad de un pariente de esta, así como la alegada falta de transparencia en el cobro de las multas que se aplican a los dueños de esos animales por parte del Ayuntamiento Municipal de Barahona.
Suárez aseguró que: “Estoy consciente de que por primera vez esas vacas rompieron los alambres del corral donde se encontraban protegidas y que eso representa un peligro para los conductores que viajan por esa zona; y por eso traté de hacer los trámites de lugar para el pago de la multa y la devolución de las mismas, a través del encargado de esa área del Cabildo en esta ciudad, pero todo fue muy complicado”.
“Desde que me enteré de esa situación hice todos los esfuerzos por contactar a José Ramírez, quien no me tomó la llamada y decidió mantener presa por un periodo de una semana a 6 vacas, dos de ellas en estado de preñez, en un carretón sumamente pequeño donde no podían acostarse, sin comida y sin agua, provocando que varias de ellas en este momento tengan heridas en su cuerpo, producto de la aglomeración a la que fueron sometidas”.
Señaló además, que al momento de realizar el pago correspondiente a la multa asignada por el señor Ramírez, no por el Ayuntamiento, este procedió a entregarle un recibo sin ninguna identificación que señale que dicho arbitrio fue pagado al cabildo señalado.
La denunciante indicó que: “Primero me dijo que tenía que pagar la suma de RD$28 mil pesos y yo le dije que solo tenía RD$ 21 mil, a lo que este procedió a hacer otro recibo por el monto de la cantidad de dinero que yo tenía; y me llamó a la atención que fuera a él mismo que le hiciera el cobro y que fuera en la noche, envés de hacerlo por las oficinas del Ayuntamiento y de día”.
De acuerdo a lo que denunció la señora Marcia Suárez, ésta indicó que le resultó extraño que presuntamente el pago de la multa que supuestamente le exigía pagar el señor Ramírez, fuera a recaer en el Ayuntamiento que dirige Mictor Fernández, y no al de Villa Central, porque según sus testigos, las vacas fueron apresadas en la zona de éste último.
Por otro lado señaló, que por coincidencia, días después del apresamiento de las reses, encontró en el lugar en donde las tenían en cautiverio, dos carniceros murmurando sobre que las alegadas multas cobradas por Ramírez, supuestamente no “cubrían los gastos incurridos por ellos”, en el arresto animal y posterior cautiverio de las rumiantes; por lo que ella entendió que quizás, la verdadera intención de Ramírez y los que estaban ahí presente era sacrificar las vacas.
La Otra Campana o Versión:
De su lado, el señor José Ramírez, que se identificó como Teniente Coronel de la Policía Municipal , empleado de Policía Turística (POLITUR), tras contactarlo nos dio su versión de los hechos, indicando que según la Resolución 010-17 del Ayuntamiento Municipal de Barahona, la tarifa que alegadamente él le cobró a la denunciante por la falta cometida por sus vacas (Vagar por las calles), es la que está establecida en dicha resolución, y que cuando se da dicha falta él es el responsable de dicho cobro en nombre del referido cabildo sureño.
“Las multas que se cobran allá por la vagancia de los animales en las calles, es las mismas que tiene el tarifario establecido en la resolución 010-17, y por cada animal se cobra un monto distinto (Ver Resolución); por eso, cuando las personas van allá (Al Ayuntamiento) se le hace un recibo de entrega o de recibido”, indicó.
Debemos de aclarar aquí, que dicha versión del oficial, se contradice con la expresada por la señora Suárez, quien afirmó que el dinero se lo entregó al oficial en sus manos; y que supuestamente éste, en vez de entregarle un recibo timbrado de dicho Cabildo, le cobró en un recibo cualquiera, que puede ser comprado en la calles o en cualquier negocio, sin ninguna identificación ni marcas de control, ni utilizó sello al momento de aplicar dicho pago.
Al ser cuestionado sobre el recibo, a la que esta periodista tuvo acceso, sin membrete, sin sello y sin nada que identificara que ese dinero iba a las arcas del cabildo, José Ramírez respondió que: “De sellarlo no es problema, lo que sucede es que la nueva alcaldía tiene que hacer los nuevos talonarios, porque cambiaron el nombre, antes era Ayuntamiento Municipal de Barahona y ahora es Nueva Alcaldía y en virtud de eso es que a partir de enero es cuando se va hacer como es debido”.
Según Ramírez, él recibió el pago y lo entregó formalmente vía tesorería, a un licenciado el cual no especificó su nombre; tras asegurar que dicho cobro, ellos (en POLITUR) lo hacen alegadamente; “solo para curarse en salud”.
En justificación sobre el maltrato animal, el señor José Ramírez explicó el por qué mantuvo los 6 mamíferos en un espacio pequeño y sin alimento, según la denuncia de Suárez.
“En varias ocasiones dueños de animales van armados, nos rompen los corrales y se llevan los animales, ahora mismo estamos buscando un lugar para hacer un corral normal; porque a esos animales se les hecha agua y un poco de hierba, mientras tanto, eso es lo que estamos haciendo, por esa razón estaban encerrados de esa forma”.
Sobre esta posición la demandante aclaró que: “Yo tenía que pagarle a un motorista todos los días para ir a llevarle un poquito de agua e hierba a esas vacas porque ahí la iban a dejar morir; Eso fue un verdadero abuso”.
Indicó también, que esos animales duraron todos esos días encerrados, porque supuestamente los dueños estaban buscando ayuda de políticos a los fines de evitar pagar la multa, versión que fue negada por Suárez, ya que ella y el propietario de las vacas pertenecen a un partido político distinto al que está en el poder.
Según Ramírez el alcalde Mictor Fernández tiene conocimiento de todo lo relativo al proceso de apresamiento de las seis vacas, del manejo del cobro y de un supuesto choque entre una de las vacas con un vehículo, por lo que esta periodista hizo varios intentos por comunicarse con el alcalde de esa provincia para conocer su ponderación sobre los hechos, pero fueron en vano, ya que respondió una vez la llamada y colgó sin escuchar, intentamos nueva vez, pero no contestó.
La Ley 248-12 de Protección Animal y Tenencia Responsable, establece lo siguiente: Artículo 4.- Protección de derechos. Es obligación del Estado salvaguardar los derechos de los animales y su igualdad ante la vida y protegerlos contra el desprecio, el irrespeto, la desatención, el descuido, el abandono, el maltrato y la crueldad a que son sometidos, prohijando el cuidado de las especies y su hábitat.
También dicta en el Artículo 6.- Obligaciones de los ayuntamientos. Los ayuntamientos de los municipios y las juntas de distritos municipales, están en la obligación de apoyar los planes y programas estatales dirigidos a la protección de los animales y crear las bases para la instalación de centros de cuidado de animales en el ámbito de su territorio.