Por Germán Reyes
Santo Domingo.- El canciller haitiano, Claude Joseph, que desarrolla una agenda de trabajo de siete días en República Dominicana, con sus declaraciones públicas “chocó” de frente con el presidente Luis Abinader en el contexto de una entrevista que le concedió en el Palacio Nacional.
Joseph, de edad aparentemente juvenil, también debió recibir los “latigazos” de sus compatriotas al momento de arengar en favor de las políticas reeleccionistas del presidente de su país, Jovenel Moïse.
Los medios locales reseñan los gestos de mal humor exhibidos por Joseph al salir del despacho del jefe de Estado dominicano. Esa actitud fue atribuida por medios escritos y televisivos a una supuesta reprimenda de parte de Abinader por declaraciones que habría ofrecido y que tendrían el efecto de intromisión en la política interna.
Según los comentarios de voceros de varios medios, el ministro haitiano jamás debió sugerir a República Dominicana en declaraciones públicas, obviando los canales diplomáticos, que el gobierno debería cambiar su retórica sobre el enfoque de los temas bilaterales.
«Hemos sido claros con el canciller dominicano en que hace falta descartar esa narrativa negativa del discurso oficial. No es bueno para Haití ni para la República Dominicana», dijo Joseph, en respuesta a una pregunta sobre las recientes declaraciones que hizo el presidente dominicano, Luis Abinader, acerca de Haití.
El mandatario dominicano, que asumió el poder el pasado agosto, ha asegurado en varias ocasiones que «no puede haber una solución dominicana» a los problemas de Haití.
La semana pasada, Abinader respaldó las declaraciones de su ministro de Salud Pública, Plutarco Árias, en las que este aseguró que República Dominicana no puede asumir el coste económico que generan las mujeres haitianas que acuden a los hospitales dominicanos a dar a luz.
Según estadísticas dominicanas, de los cerca de 167.000 partos que se producen cada año en el país, en cerca de 20.000 la madre es haitiana.
Sobre esta polémica, el ministro haitiano dijo que «hay que situar bien el problema» y «encontrar la causa fundamental».
«¿Son mujeres que viven en República Dominicana? ¿Se constata que hay una inmigración de mujeres? ¿O hay prácticas subterráneas entre los dominicanos, los haitianos y los doctores para hacer venir a las mujeres embarazadas? Hay una combinación de tres o cuatro factores. Hay que encontrar la causa fundamental», comentó Joseph.
En la Embajada haitiana
Asimismo, el ministro haitiano debió recibir las críticas de opositores de su país en una asamblea que realizó en la Embajada de su país en República Dominicana como parte de una labor proselitista que desarrolla en su viaje de una semana.
Voceros de la comunidad haitiana que prefirieron el anonimato reprocharon que el funcionario se aprovechara de sus funciones para promover una modificación constitucional y unas elecciones que habrían recibido un rechazo rotundo en su país.