Debido a la pandemia del covid-19, el ministerio de educación postergó la fecha de inicio del año escolar 2020-2021 y siguiendo las recomendaciones
del Ministerio de Salud, decidió iniciar bajo la modalidad de educación no
presencial.
Esta situación implicó un gran reto y obligó a realizar las adecuaciones
necesarias para garantizar el proceso de enseñanza-aprendizaje. Por tal motivo,
se realizó una priorización curricular y se han previsto y utilizado distintos
medios y recursos para la docencia, tales como: clases por internet, grupos de mensajería,
clases virtuales, y otros.
En el taller se vislumbró que existen otras realidades que implica las
adecuaciones al proceso de evaluación de los aprendizajes, el cual es parte
fundamental del proceso educativo.
La socialización se desarrolla con la finalidad de que los principales
actores del proceso educativo reconozcan y aprecien la eficacia de la enseñanza
y la calidad de los aprendizajes es por ello, que se considera desde la
funcionalidad los distintos tipos de evaluación que contempla el diseño curricular:
diagnostica, formativa y sumativa.
Unos de los objetivos
de la socialización es identificar la condición de entrada de los estudiantes y
continuar en el desarrollo de las competencias específica del grado al que
corresponde, mediante un proceso de valoración sistemático (según los momentos
de la evaluación) que permita determinar el dominio de las competencias del
estudiante.
En el encuentro surge la interrogante ¿De qué va a pasar con los alumnos que no pudieron conectarse?
Los directores y
coordinadores a una sola voz destacaron que muchos no tuvieron acceso a la conectividad,
pero si trabajaron con el cuadernillo, y se mantuvieron al día en sus clases,
por el seguimiento que sus maestros les habían dado en esos casos especiales.
Departamento de
Comunicaciones del Distrito Educativo 01-05 JPPB