Barahona. – Actores que pertenecen a partidos y entidades de naturaleza distintas coinciden en un aspecto en beneficio del desarrollo social, económico y ambiental de esta provincia: que el emblemático, turístico e histórico hotel Guarocuya no se convierte en un hospital para personas con padecimiento de cáncerLuego que el diputado Moisés Ayala Pérez, médico-oncólogo, miembro de la Sociedad Dominicana de Oncología (SDO), anunciar que el presidente Luis Abinader habría dispuesto que el hotel Guarocuya pase a ese grupo para construir allí un hospital para pacientes que sufren esa condición de salud, la población lo desaprobó y unificó sus esfuerzos.
Nuevamente y como muestra de madurez, esos mismos sectores,
así como actores locales, no importando pertenecen al partido oficial o se es
opositor, coinciden en que la estructura que aloja el citado hotel no debe
convertirse en hospital porque “castra” el desarrollo de esa zona territorial,
cuya vocación es altamente turística como así han determinado diversos estudios.
El alcalde Mictor Emilio Fernández de la Cruz, a quien
corresponde actuar dentro del ámbito de su territorio ha sido claro en su
planteamiento: en ese lugar no puede, bajo ningún concepto establecerse un
centro para tratar asuntos médicos.
En cambio, Fernández de la Cruz, a través de un extenso
escrito en la red social de Facebook, consideró que en vez de hacer lo que ha
sido divulgado a la comunidad, sugiere conservar ese espacio que, afirma, es un
referente en términos históricos y culturales.
“Los pueblos que no conservan sus monumentos no podrán
recordar su historia, como consecuencia de esto tendrán poco que exhibir a las
nuevas generaciones”, expuso el síndico municipal por el Partido Revolucionario
Moderno (PRM).
Citó el caso de Europa, continente que, señala, fundamenta su
turismo y grandeza en mostrar sus monumentos milenarios, preguntándose ¿qué
hubiese pasado con la Torre Eiffel, construida en el 1889, en Francia, si se le
hubiese antojado a un grupo de mercaderes de la medicina construir en esos
terrenos un hospital, con el argumento de que París necesitaba más salud?
Ante la pregunta que formula, contesta que el viejo
continente hoy no fuera un ícono mundial y como muestra indica que Torre Eiffel
la visitan cada año más de 6 millones de personas.
“Más del 80% de los turistas que visitan París, lo hacen por
ir esa gran obra de la arquitectura, se trata de la ciudad de la cultura,
conocida, además, por el más grande movimiento político/social que conoce la
humanidad: la Revolución Francesa, sobre los derechos humanos en el mundo”,
expuso el alcalde.
Advirtió que Barahona no sería la “Perla del Sur” sin su
historia y símbolos, como el reloj público, play “Las Saladillas”, restaurante
“La Roca”, el Hospital Jaime Mota, “La Bahía”, “Brisas del Caribe”, el “Arco de
Triunfo” y el gran Hotel Guarocuya.
“La lucha por mantener nuestros monumentos históricos, no
debe, ni puede ser un tema político/partidario, mucho menos económico, debe ser
por patriotismo y apego a nuestra ciudad”, afirma.
Aspecto legal de propiedad
Fernández de la Cruz, quien es abogado de formación, señaló
que, si se razona sobre el aspecto legal del derecho de propiedad que establece
la Constitución, habría que examinar si aplica para los íconos históricos de
los pueblos.
Aclara, sin embargo, que el Hotel Guarocuya no es un
monumento histórico en derecho, pero sí de hecho, por su significado en lo
cultural e histórico para sus habitantes.
“Nos apegamos a la máxima jurídica que establece “entre el
derecho y la justicia, predomina la justicia”, expuso el Alcalde y abogado en
su escrito.
Además, cita la Ley 176-07, que rige a los Municipios y el
Distrito Nacional, específicamente el artículo 19, acápites A, D, F Y H, que
establece muy claro la facultad de los ayuntamientos sobre las construcción o
remodelación dentro de la demarcación y áreas geográficas determinadas.
“Desde nuestro rol como gobierno municipal haremos todo lo
que haya que hacer para mantener este y todos nuestros símbolos históricos, no
daremos un paso hacia atrás con nuestra posición de que el Hotel Guarocuya no
sea utilizado para ningún tipo de centro médico”, expuso categóricamente el
alcalde.
Mictor Emilio Fernández de la Cruz, dijo que su lucha estará
orientada en hacer en que esa estructura se convierta en lugar de atracción
para turistas, tanto locales como extranjeros con miras a proyectar más esta
ciudad.
Su vocación es altamente turística
En el período 2010/2016 de la gestión municipal que encabezó
el exalcalde Noel O. Suberví Nín (Tavito), a través de la fundación española
Demuca, con un financiamiento de 95,000 euros, que aportó la Unión Europea, se
hizo el estudio: Proyecto de políticas locales de promoción del desarrollo
económico y el ordenamiento urbano para mejorar la convivencia ciudadana en el
municipio de Barahona.
Como resultado del mandato del estudio se elaboró un
diagnóstico territorial y de usos de suelo, identificación del modelo
territorial actual y desarrollo de un proceso participativo de simulación de
escenarios y proyecciones de ordenamiento territorial en el municipio que
identificó las vocaciones de cada espacio del territorio.
La zona en donde se encuentra ubicado el hotel Guarocuya,
hacia la salida de la zona costera, se definió como de “alta vocación
turística”, por lo que el planteamiento de establecer en el lugar un centro de
salud resulta contra producente e ilógico desde el punto de vista del estudio
que se efectuó, pero que aplicó la pasada gestión municipal y que puede servir
de insumo para la presente que encabeza Fernández de la Cruz.